El fútbol playa salvadoreño sigue demostrando su impacto gracias al talento de sus jugadores y la plataforma brindada por la Liga de Fútbol Playa (LFP), organizada por el Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador (INDES). Esta liga, que ha ganado relevancia en los últimos años, no solo ha mejorado el nivel competitivo a local, sino que ha abierto oportunidades para que los salvadoreños como Fátima Pérez y Wilber Navarrete puedan mostrar su talento en escenarios internacionales.
Ambos futbolistas fueron seleccionados para reforzar equipos extranjeros en la Beach Soccer World Winners Cup 2024, que se está llevando a cabo en Alghero, Italia. Fátima Pérez, jugadora del actual campeón BS UES, fue invitada a jugar con el Beach Soccer VB Elite Women de Estados Unidos y con esta suma ya su tercera participación en el mundial de clubes, pues también compitió en 2022 y 2023 con el equipo femenino de Barra de Santiago.
Mientras que Wilber Navarrete, guardameta de San Marcelino, se unió al Canadá BSC, equipo que ya está clasificado a los octavos de final del torneo mundial.
Tanto Pérez como Navarrete coinciden en que la Liga de Fútbol Playa ha sido fundamental para abrirles puertas y ofrecerles oportunidades que anteriormente no habrían sido posibles. Para ellos, la LFP se ha convertido en una plataforma de proyección internacional. “La liga me ha ayudado bastante a sobresalir”, comenta Fátima, quien recibió la invitación para unirse al equipo estadounidense después de haber sido nombrada Jugadora Más Valiosa (MVP) en la final de la LFP.
“Desde que se creó la liga, nuevas jugadoras como yo estamos siendo vistas, y eso nos da oportunidades de crecer”, señaló Pérez.
Navarrete, por su parte, confirma el papel crucial que ha jugado la LFP en su carrera. “La liga nos abre puertas a los jugadores salvadoreños. Nos ven desde afuera y equipos internacionales pueden llamarnos, como fue en mi caso”, dijo.
Navarrete comentó que recaudó fondos con amigos y conocidos para hacer realidad su viaje a Italia. Y a pesar de los desafíos, para él esta oportunidad es una validación del esfuerzo y la disciplina que ha puesto en su carrera. “Que un equipo extranjero se fije en mí significa que estoy haciendo bien las cosas, y eso es gracias a la liga, que nos ayuda a crecer como futbolistas”, comentó el guardameta.
Una oportunidad para brillar
Para Fátima Pérez, el llamado para unirse al equipo estadounidense llegó de manera inesperada. “Recibí la noticia de la invitación casi de la nada, el miércoles antes de comenzara el torneo”, recuerda. A pesar de haber estado dos meses fuera por una lesión en el tobillo, su rendimiento en las instancias finales de la LFP llamó la atención de sus nuevas compañeras en Estados Unidos, quienes la recibieron con los brazos abiertos.
“Ellas creen en mí, y me siento muy feliz por el trato que me han dado”, asegura Fátima, quien ve esta experiencia con el club norteamericano como una puerta abierta para futuras oportunidades.
Navarrete también ha tenido una experiencia positiva en Italia. “El ambiente en el equipo es excelente, aunque me hablen mucho en inglés y no entienda todo”, comenta entre risas. Sin embargo, más allá de las bromas, Wilber destaca el nivel competitivo del equipo y confía en que seguirán avanzando en el torneo.
“Yo soy de la Costa del Sol y entreno todos los días a las 5 de la mañana. Este esfuerzo tiene su recompensa en chances como esta”, afirmó.
Las oportunidades como la de Fátima y Wilber no son casos aislados. La Liga de Fútbol Playa del INDES ha demostrado ser un verdadero semillero de talentos para el fútbol playa salvadoreño.
Los jugadores han encontrado en esta competencia un espacio para desarrollarse, mejorar su juego y ser vistos por equipos internacionales que buscan nuevos talentos. Además, poco a poco se han sumado más y más extranjeros que confirman el nivel competitivo de este torneo.
Pérez y Navarrete son un reflejo de lo que la LFP puede ofrecer a sus participantes. Ambos recibieron la oportunidad de estar en la Beach Soccer World Winners Cup 2024, un evento que reúne a los mejores clubes del mundo. Pero más allá del torneo, lo que estos jugadores están sumando a su carrera es la experiencia de competir a nivel internacional y la posibilidad de seguir creciendo.
La Liga de Fútbol Playa ha demostrado ser un puente para que los jugadores locales brillen en escenarios internacionales. Esta vez, Fátima y Wilber han podido llevar su talento más allá de las fronteras, demostrando que el fútbol playa salvadoreño tiene un lugar en la escena global.
“Donde sea que me llamen yo siempre voy a representar a El Salvador”, declaró Fátima.
