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El voleibol, la bendición de Dios para los Vargas

Allá por 2006, los hermanos Vargas, Rafael y David, jugaron su primer torneo juntos: el Centroamericano Mayor de Voleibol de Playa, en Montelimar, Nicaragua, en donde obtuvieron medalla de plata.

Hoy, en noviembre de 2022, los primos Vargas, Rafael y Gabriel, hijos de Rafael y David, respectivamente, jugarán su primer torneo juntos: el Campeonato Centroamericano de Voleibol de Playa sub-21, que se llevará a cabo a partir de este viernes en Panamá. 

De esta forma, se cumple con el sueño de todo padre y deportista: ver a su hijo practicar ese mismo deporte que le brindó tantas alegrías y triunfos en su vida. 

El responsable de que el voleibol llegara a la familia Vargas, fue Rafael, el mayor de los hermanos, quien en 1990, en su etapa de estudiante, comenzó a practicarlo en el Instituto Técnico Ricaldone.

“Inicié en el colegio jugando voleibol sala, fue ahí en donde gracias a mi buen rendimiento, me convocaron a la selección nacional. Eso fue entre los años 1990 y 1995, un año después me incorporé  a la modalidad de playa y así fue como comenzó esta aventura. Este deporte es una bendición de Dios para la familia”, expresó Rafa, el popular “Tribi”.

El mayor de los Vargas participó en tres ciclos olímpicos que le dejaron dos platas centroamericanas , un cuarto lugar en Juegos Centroamericanos y del Caribe, y un sexto puesto en Juegos Panamericanos. 

“Participé en tres etapas del Ciclo Olímpico. Los mejores resultados que obtuve fueron  en los Juegos Centroamericanos en 1997, cuando conseguimos una medalla de plata; cuatro años después repetimos el resultado en los Centroamericanos de 2001 en Guatemala. Para los Centroamericanos y del Caribe de 2002 quedamos en cuarto lugar y fuimos sextos en los Panamericanos de Santo Domingo”, recordó Rafa, quien en aquel entonces hizo pareja primero con German Calderón y luego con Jeovanny Medrano. 

Pero el destino le tenía preparado algo más a Rafael, ya que en 1999, David, su hermano menor, pasaba por momentos difíciles en su vida y aceptó la invitación para entrenar y jugar voleibol, decisión que le cambió el rumbo a la familia Vargas.

“Llegué al voleibol viendo jugar a Rafael, tengo que mencionarlo que mi hermano y este deporte fueron mi salvación, ya que no me enorgullece decirlo, pero estaba sumergido en las drogas y Tribilín me incentivaba para ir a entrenar. Él y su entrenador en aquel momento, Omelio Castillo, me motivaban para ir a entrenar con ellos, de eso ya pasaron 23 años”, contó David, mejor conocido en el voleibol como Pepe y quien hasta la fecha se mantiene activo competitivamente. David contabiliza entre sus mejores resultados tres medallas de plata y tres bronces  en diferentes ediciones de los Juegos Centroamericanos y una participación en el Tour Mundial de Voleibol Playa. 

“Mi mejor resultado fue la participación en el Tour Mundial de Voleibol de Playa el año pasado. Pero he logrado medallas de plata y bronce en campeonatos centroamericanos tanto de voleibol playa como en sala”, aseguró David. 

Para 2006, los hermanos Vargas mostraron su talento sobre la arena, al jugar juntos con el mismo objetivo durante un año, en el que consiguieron un segundo lugar en el Open Centroamericano de Montelimar, en Nicaragua.

“Haber jugado con Tribi fue una de las fases más importantes en mi vida, ya que es mi mentor, lo quiero mucho y él sabe que soy su más fiel admirador. Ese año que jugamos juntos no ganamos muchas medallas, pero fue algo que deseaba, pues él me motivó para ser jugador de voleibol”, reiteró Pepe. 

Treinta y dos años después, el voleibol sigue presente en la familia Vargas, ahora con los hijos de Rafael y David, quienes jugarán por primera vez juntos en un evento regional. Rafael (hijo) y Gabriel, con apenas 15 y 18 años de edad, respectivamente, buscan igualar o mejorar lo que sus padres lograron como atletas.

“Mi papá me llevaba a ver entrenar desde muy pequeño, es por eso que me incliné a jugar voleibol. Mi padre es mi héroe y me ha incentivado a aprender de las cosas buenas de él, su influencia y apoyo ha sido importante para mi vida, quiere igualar o mejorar lo hecho por él”, aseguró Gabriel. 

Gabo también ya ha tenido la oportunidad de jugar con su padre  en una fecha del Tour Norceca, así como en la eliminatoria para el Tour Mundial. 

“Jugar con mi papá ha sido una experiencia de mucho aprendizaje, estar en la cancha con quien te ha enseñado a jugar es algo que me quedará guardado en mi mente y corazón para toda la vida”, manifestó Gabriel.

Mientas que, para Rafael (hijo),  involucrarse en este deporte no era parte de sus planes a futuro, debido a que jugaba fútbol hasta hace un par de años en la reserva de un equipo profesional del país, pero la pandemia de covid-19, suspendió su proceso, período en el que su padre aprovechó para motivarlo a practicar voleibol.

“Fue en 2020, poco después de la cuarentena que mi padre me llevaba a entrenar y la verdad no me gustaba mucho, disfrutaba más el fútbol, pero entrenando con mi padre y mi tío fue como me decidí a entrar. Pero fue hasta el Centroamericano del año pasado que me emocioné y me decidí a jugar para estar en una selección”, manifestó Rafita. 

Jugar juntos motiva e inspira a los primos para luchar por un podio en el evento regional y comenzar a escribir su propia historia como atletas profesionales. 

“Me sentí muy emocionado al saber que iba a jugar con mi primo, que la gente dice ´vuelven los Vargas´. Es interesante estar en esta posición, en la que estuvieron nuestros padres en algún momento de sus vidas”, dijo Rafa. 

Uno de los los mejores resultados de Gabriel fue ser el segundo mejor rematador en el Campeonato Centroamericano Sub-21 de voleibol de sala este año en Honduras. Mientras que para Rafita, el resultado más sobresaliente en su carrera deportiva se encuentra en un segundo el Campeonato Centroamericano Sub-21 de voleibol sala, en Nicaragua.

En la familia Vargas también juegan voleibol Adriana, de 12 años, hija de Rafael, pero por cuestiones personales ya no se dedica a practicar voleibol. También está Leonel, hijo mayor de Tribilin, y Cristian, el primogénito de David, quienes siguen la tradición voleibolista.

Junto a los primos Vargas, en el Campeonato Centroamericano Sub-21 de Voleibol de Playa también participarán los gemelos Christopher y Yoel Guardado, así como en femenino lo harán Karla Tovar y Daniela Vigil, así como Alexandra Reyes y Alessandra Álvarez.  

En otro evento, en categoría mayor, las duplas conformadas por  David Vargas- Armando Guatemala e Yvonne Soler-Sofia Velásquez, también competirán a partir de este viernes en el Tour Norceca que se llevará a cabo en Islas Caimán, del 11 al 13 de noviembre.

Publicado el 10-11-2022.