El esfuerzo, entrega y disciplina son elementos muy importantes en la práctica de un deporte, pero también el apoyo incondicional de los seres queridos es fundamental para ser un atleta integral. Ese es el caso de Jefferson Días y su abuelo Jorge Reyes.
Jefferson, de 13 años, asiste a los entrenos de fútbol en la cancha Monserrat en compañía de su abuelo Jorge, quien trabaja como mecánico automotriz, y dedica parte de su tiempo en acompañar a su nieto a todos los compromisos deportivos.
“Gracias al esfuerzo de mi abuelo practico mi gran pasión que es el fútbol. Él me da ánimos si tuve un mal partido y también me dice los aspectos que debo mejorar en el terreno de juego, él es un gran apoyo para mí”, expresó.
El futbolista, quien se desenvuelve como lateral izquierdo en el equipo IMDER de la Copa Alevines grupo 1 de San Salvador, enfrentó a Ciudad Delgado con el que cayeron 2-3 y vencieron 3-2 a San Marcos.
“Estoy muy feliz porque ambos partidos estuvieron buenos, los jugadores son muy competitivos y eso es bueno porque uno se autoexige para dar lo mejor en cada duelo”, comentó Días.
Mientras Jefferson disputó los partidos, don Jorge se mantuvo enfocado en el desenvolvimiento de su nieto en la cancha del Complejo Deportivo Katya Miranda, donde no perdió de vista ninguna jugada que el lateral realizó ante sus contrincantes.
“Verlo jugar fútbol es algo que me llena de emoción y me enorgullece porque este deporte es una pasión para él. Gracias a eso es un niño sano enfocado en sus estudios y es un buen compañero”, dijo el abuelo.
